lunes, enero 28, 2008

Efectos espejos…. Ese rudo ejercicio de descubrirse a través de los demás.

"Is true that my form is something odd,
But blaming me is blaming God;
Could I create myself anew
I would not fail pleasing you.
If I could reach from pole to pole
Or grasp the ocean with a span,
I would be measured by the soul;
The mind´s the standard of the man"
(Es cierto que mi forma es muy extraña,
pero culparme por ello es culpar a Dios;
si yo pudiese crearme a mí mismo de nuevo
me haría de modo que te gustase a ti.
Si yo pudiese alcanzar de polo a polo
o abarcar el océano con mis brazos,
pediría que se me midiese por mi alma,
porque la verdadera medida del hombre es su conciencia.)





Hoy desperté de un sueño largo e intenso, hoy desperté acompañado de mi mismo, pero con la misma sensación de Gregorio Samsa, cuando amanece convertido en insecto, tal como la metáfora de Kafka, que luego de un tiempo de guerra y de alejamiento del mundo cotidiano, volvemos a éste convertidos en otro; ya no somos más quienes fuimos, luego de pasada la lucha, luego de verse al espejo.... nos descubrimos otra vez.





Ya desde un tiempo que vivo la ruda experiencia de mantenerme drogado, siempre prendido a soplos de viento huracanado, asido a las gotas de lluvia de una inmensa tormenta, desde hace ya varios meses, que vivo como el mensaje de una botella perdida en el mar, esperando que llegue hasta vos (siendo que seguro nunca llegará hasta nadie).

Mas, imposible que el sueño dure por siempre, y alguna ves hemos de despertar y vernos al espejo, y enfrentar al monstruo que asoma en él y que nos muestra, otra cara de esta misma moneda.

Me convencí, me miré y vi, mucho de lo antes oculto, mucho de lo que nunca observé; vi la distancia abismal entre mis intenciones y mi realidad, vi que me conozco la nada y que lo que creo ser, es una ilusa visión de mi mismo proyectado más que nada en lo que quisiera ser.

Siempre admití que la distancia entre mi discurso, que es lo que quiero ser; no es necesariamente consecuente con lo que soy, o lo que hago. Para mi es muy clara la diferencia, entre actos e intenciones, siendo el acto y queriendo ser la intención. Mas hoy que miré la distancia tan de cerca, me di cuenta que era infinita…

Ese rudo ejercicio de descubrirse en el otro, finalmente me entregó resultados, y me descubrí escarabajo queriendo ser un cisne, me descubrí solo un monstruo, queriendo ser un angel, me descubrí siendo malo… queriendo ser un santo.

Me descubrí como una pobre entelequia de mierdas, que lejos de aportar restan, que lejos de ayudar, sesgan; que lejos de entregar libertad, suma miedo. Me descubrí, que queriendo ser un liberador, soy un pobre opresor, lleno de egoísmos, de miedos, de celos, de trancas…

Me descubrí, al verme al espejo luego del sueño, tal como estoy hoy, luego de este camino continuo de inconciencias, convertido en NADIE, hoy soy menos que una pelusa en un ombligo.

Me descubrí, ruin, pobre, tacaño, melindroso, llorón, feo… horrible. Me descubrí más que chanta, menos que mentiroso, menos que estafador…. Y no sé si es consuelo, el haberme robado a mi mismo, en haberme engañado a mi mismo, el haberme mutado a mi mismo, sin siquiera ver el camino hasta acá; pero al final, hoy me veo, un poco más honesto y pero mucho más desolado.

Recuerdo un tema de meditación, que era el abismo, que de una u otra forma tendía a la desolación, como parte del encuentro; hoy en el fondo del abismo, la desolación se hizo inmensa y me convertí en algo menos que un bicho…

Hoy que hasta para lastre estoy caro, veo como es mejor saltar de este bote e intentar llegar donde el mar mismo me lleve… esta fiebre de ancla, me resulta demasiado estos días, y si bien para dejar de ser este obstáculo, he de tener un camino, hoy quiero dejar de serlo aún sin encontrar ninguno.

Hoy me descubrí en el espejo, y me vi tan feo… que hasta las lágrimas se arrancan de mi.

Me siento el hombre elefante, que Lynch tan bien nos mostró; pero mucho más terrible, ya que mi fealdad no obedece a azares de vida, si no a mis propios procesos actuales, a diferencia del monstruo del cine, este adefesio es mi creación… mas tal como él, no me queda más que la muerte.

Gracias miles a este lindo espejo, que a punta de sus propios procesos, me ayudó a conocerme más... si no me acepto cual monstruo… jamás la oruga mutará en mariposa; y aún en el fondo mismo de mi (en verdad espero no haya nada más abajo por descubrir en estos tiempos) espero me alcancen los días para estar un poco más cerca de lo que al menos de mente si quiero ser.